Cómo controlar el peso con esclerosis múltiple

Mantenerse en un peso saludable puede ser un reto para muchas personas, pero puede ser especialmente difícil para las personas que conviven con esclerosis múltiple debido a factores que no siempre dependen de la propia voluntad, como la fatiga, la depresión o la terapia con esteroides.

Todo el mundo puede tener sobrepeso, pero las personas con EM, además, pueden ver agravados algunos de sus síntomas o sufrir problemas como: fatiga, dolor de articulaciones, úlceras por presión, imagen personal negativa o riesgo de sufrir complicaciones u otras enfermedades. Por eso hay que tener especial cuidado y cuidar la relación con el propio cuerpo.

Todo el mundo puede tener sobrepeso, pero las personas con EM, además, pueden ver agravados algunos de sus síntomas

Claves a la hora de mantener un peso saludable

Antes de empezar hay que marcarse un objetivo realista. No se trata de buscar imposibles, porque es probable que se abandonen los propósitos marcados antes de tiempo.

Hay muchos factores que contribuyen a nuestro peso: entorno, historial familiar y genética, metabolismo, hábitos… Por lo tanto, debemos tratar de centrarnos en lo que se puede controlar. Otro factor clave es el balance energético: el equilibrio entre la energía recibida (alimentos que se ingieren) y la energía que se gasta (respiración, digestión, desgaste físico…):

• Energía recibida = energía gastada: el peso se mantiene (equilibrio energético)
• Energía recibida> energía gastada: aumento de peso
• Energía recibida <energía gastada: pérdida de peso

La mejor manera es empezar con motivación y no obsesionarse con el peso; simplemente seguir unos hábitos de vida saludables que permitan alcanzar el objetivo marcado con más facilidad.

La mejor manera es empezar con motivación y no obsesionarse con el peso; simplemente seguir unos hábitos de vida saludables que permitan alcanzar el objetivo marcado con más facilidad

Maneras de mantener el peso bajo control

En el siguiente listado se muestran algunos consejos que pueden ser útiles para conseguir un peso más saludable:

• No hacer dieta: la mayoría no funcionan a la larga. Una opción útil puede ser moderar las porciones de las comidas.
• Empezar modificando una sola comida, como el desayuno, por ejemplo. Optar por opciones saludables como fruta fresca o tortilla francesa y, una vez se tenga el nuevo hábito, modificar otro plato principal.
• Entre horas, elegir comida saludable como frutas, verduras o frutos secos. De este modo, también se reduce la cantidad que se come en las comidas principales.
• Aumentar la ingesta hídrica, tomar un litro y medio de agua al día o cada vez que se sienta sed.
• Cambiar de hábitos de manera progresiva: no se trata de correr. Los hábitos se modifican a largo plazo, no hay que tener prisa.
• Concentrarse en la comida: no es bueno distraerse mirando la televisión o leyendo el periódico durante las comidas, ya que de esta manera se tiende a comer más.
• Buscar el apoyo de la familia: siempre es más fácil cambiar los hábitos si la pareja o un familiar próximo hace los mismos cambios.
• Hacer ejercicio: empezar con unos pocos minutos al día. Se puede ir al gimnasio o bien ejercitarse en casa. Se trata de hacer estiramientos y ejercicios sencillos –recomendados por un profesional–, incluso con música de fondo. Pero lo más importante es ser constante; hay que hacer un poco de ejercicio cada día.
• Motivarse a partir de pequeños incentivos: marcarse un calendario y tener presente cuáles son las próximas fechas especiales: aniversarios, bodas, vacaciones, etc. Hay que centrarse en mejorar el peso para disfrutar más en estas fechas, y cuando el evento especial haya quedado atrás, concentrarse en el próximo.

Acceso al documento original:

Take Control of your Weight. Disponible en: http://www.nationalmssociety.org/Living-Well-With-MS/Health-Wellness/Nutrition/Take-Control-of-Your-Weight

Mantain a healthy weight. Disponible en: https://www.nhlbi.nih.gov/health/educational/lose_wt/index.htm